La Municipalidad de Ushuaia acordó con los gremios que representan a las trabajadoras y trabajadores municipales un incremento que eleva al 35,5% lo establecido en el decreto municipal 1324/23, con montos acumulativos y al básico, que representa un acumulado anual de incremento salarial del 95,5%. Pautaron además tres mesas salariales que tendrán lugar en septiembre, octubre y noviembre. También habrá una revisión del convenio colectivo que tiene que ver con cuestiones particulares de cada sector.
El intendente Vuoto destacó que “hemos podido lograr el acuerdo que nos permiten avanzar, seguir dialogando y resolver, con nuestros trabajadores y trabajadoras, en un contexto muy difícil pero con la mayor buena voluntad de todas las partes y esto lo quiero reconocer”.
A lo establecido en el decreto municipal, que fijaba un 5% en julio, se agregaron 2 puntos más en agosto elevándolo al 8,5%, un 6% en septiembre en octubre y se sumó el 3 y el 5% en noviembre y diciembre respectivamente, que serán el piso para la discusión del último bimestre. En las mesas salariales, antes de finalizar octubre se abordarán las diferencias pendientes de los meses de mayo, junio y julio.
Acordaron los paritarios del Ejecutivo municipal Mauricio Neubauer y David Ferreyra y por los sectores gremiales, la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) representada por Carlos Córdoba y Roberto Oyarzo, el Sindicato de Obreros y Empleados Municipales (SOEM) por Manuel Ojeda y Mario Núñez, la Asociación Sindical de Empleados y Obreros Municipales (ASEOM) en la figura de Gustavo Cuevas, el Sindicato de Empleados Municipales y Provinciales (SEMUP) representado por María Almonacid, el Sindicato del Personal Jerárquico representado por Oscar Umführer y Jorge Pérez y la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) con la presencia de Brenda Bustamante.
En razón del acuerdo logrado, las entidades sindicales levantaron la totalidad de las medidas de acción directa anunciadas y el Ejecutivo aceptó el pedido gremial de hacerse cargo del aporte extraordinario del 7% a la Caja de Previsión Social, que le era retenido a los trabajadores ingresantes al sistema municipal durante los primeros 12 meses de prestación de servicios.
